FONDOS FIDUCIARIOS PARA EL DESARROLLO
MUNICIPAL:
El caso del ex Cine Teatro San Martín.
¿Cómo recuperar espacios de la ciudad de Azul sin que ningún actor
“meta la mano en el tarro”?
“Invertir
en Azul” es el nombre del fondo fiduciario que se ha puesto en marcha
para recuperar el complejo cultural San Martín en la ciudad de Azul,
Provincia de Buenos Aires, y que funciona como una herramienta para
financiar un proyecto de desarrollo local, como es la refacción y
recuperación de un símbolo urbano azuleño.
Si bien el
objetivo final del fondo es el armado de un moderno complejo cultural que incluya
instalaciones de cine, teatro, salas de exposiciones y convenciones y la
oferta de servicios complementarios (gastronómicos y de entretenimiento),su idea rectora ha sido la vinculación de la capacidad
de ahorro y de inversión de los residentes de Azul con la reactivación del
compromiso social de los ciudadanos para con su localidad. Este dinero es
necesario para llevar a cabo proyectos que apuntalen el desarrollo local
desde una perspectiva de integración público- privada.
“Confiar,
Soñar, Invertir” es el lema de esta iniciativa que intenta rescatar
el ímpetu emprendedor de los habitantes de Azul y que, al mismo tiempo,
restringe el poder de administración sobre el fondo por parte de la Municipalidad de
Azul y por parte de los inversores privados.
¿Cómo funciona
este fondo promotor del desarrollo local?
Cómo destacan los
funcionarios municipales de Azul, el fondo fiduciario “Invertir en
Azul” está constituido por un monto de recursos que se entrega a una
institución fiduciaria para su manejo. Un tercero independiente a las
partes involucradas- Municipalidad de Azul e inversores privados-
administra cómo se va a utilizar el dinero depositado. En el caso de la
recuperación del ex Cine Teatro San Martín, el administrador del fondo
sería, hasta la fecha, Bapro Mandatos.
La lógica de
puesta en marcha de esta herramienta financiadora
comienza con el pedido de la constitución de un fondo fiduciario por parte
del Ejecutivo Municipal al gobierno de la Provincia de Buenos
Aires. Una vez que el gobierno provincial acepta esta iniciativa, el
Municipio pasa a contar con la garantía del Banco Provincia y del gobierno
provincial. De allí en más, el Ejecutivo fija un monto exacto de dinero a
recaudar (2,5 millones de pesos en el caso de Azul) y abre una cuenta en el
Banco Provincia.
Este fondo es una
inversión a tres años que paga una tasa de interés del 12% anual en pesos a
partir de enero del 2007 y que tiene por objetivo canalizar los ahorros de
los azuleños en la recuperación de los espacios
urbanos más simbólicos. Lo interesante de esta herramienta financiadora es que cualquier residente de la ciudad
puede invertir desde $500. De esta manera, se generó una lógica de
inversión en la ciudad para preservar un símbolo del patrimonio
cultural local que hacía años no se
veía. Otra cuestión atractiva para los inversores privados es que pueden
transferir el monto que hayan invertido en el fondo para saldar otras
deudas.
Más allá del
funcionamiento propio del fondo fiduciario, lo destacable de esta
experiencia de desarrollo municipal, propuesta de una manera distinta, es
que va generando un sentimiento de compromiso social por parte de los
residentes de Azul para con su localidad. Este tipo de iniciativas generan
la confianza y la seguridad necesaria para que los azuleños
decidan colocar sus ahorros en su ciudad y no en otra parte.
Asimismo, el
hecho de que se haya constituido un fondo que no puede ser administrado por
los funcionarios de la municipalidad ni por ningún otro organismo
municipal, agrega un poco más de transparencia al proceso si se tiene en
cuenta que las cuentas municipales suelen ser un lugar común de críticas
hacia el gobierno. Claro que la
constitución de fondos fiduciarios municipales no es la receta mágica para
ningún municipio. Las experiencias pueden salir mal y todo dependerá de
cómo se gestione el proceso completo. Lo que sí puede destacarse es que lo
positivo de este tipo de fondos es que los ciudadanos gozan de un beneficio
más cercano a diferencia de lo que sucede cuando una persona decide invertir
en un fondo fiduciario de tipo nacional. Queda en la manos de quienes
participan del proceso que su proceder sea lo más limpio posible.
Rocío González
Programa
Gestión Pública Local
Fundación
CIPPEC
LA MUNICIPALIDAD
DE CÓRDOBA SIEMPRE UN PASO ADELANTE
El
Observatorio Urbano de la
Ciudad de Córdoba
En su afán por
estar siempre a la vanguardia de la administración pública local, la Municipalidad de
la Ciudad
de Córdoba se lanzó de lleno en la implementación del Observatorio Urbano.
Éste es una herramienta de gestión estratégica creada para generar información continua sobre la
ciudad. Se lo puede entender como un centro de información estadística y,
principalmente, una herramienta de visión y planificación urbana futura. Lo
distintivo del Observatorio es que trabaja en conjunto con la información
existente, los usuarios- consumidores de información y la información que
genera por medios propios.
Cómo remarcan las
autoridades en su sitio Web: “El objetivo movilizador
es el de observar los cambios económicos, sociales y territoriales del
espacio local. Este análisis socio-espacial permite la identificación,
medición y localización territorial de diferentes aspectos que le preocupan
a las autoridades: la pobreza urbana, la movilidad social, la
contaminación, la concentración del uso del suelo, la eficiencia energética
y el uso del agua, entre otras cuestiones.”.
Como objetivo
vector, el Observatorio se ha propuesto: construir herramientas eficaces
para el análisis económico-territorial de la Ciudad de Córdoba que
permitan el seguimiento adecuado del entorno cambiante al cual se enfrentan
el Estado municipal y los actores productivos y sociales a la hora de la
toma de decisiones.
Otros objetivos
que no deben pasarse por alto son: recoger, analizar y generar información
cuantitativa y cualitativa confiable que permita ofrecer una perspectiva
amplia de la ciudad y su evolución; integrar el análisis de la información
para la toma de decisiones a la hora de planificar las líneas de
actuación futuras; facilitar el acceso a la información y su análisis a
diferentes agentes relacionados con el desarrollo de la ciudad y difundir
información a través de informes o publicaciones a disposición de todos los
usuarios.
El caso del
Observatorio de Córdoba debe tomarse como una excelente práctica
gubernamental ya que sus tareas mejoran la calidad de la gestión en el
ámbito municipal. No cabe duda que esta práctica podría trasladarse a nivel
provincial, si bien se contempla que la complejidad sería mucho mayor. Por
esta razón, se empezará por destacar las tareas a nivel municipal. Entre
ellas: mantener el contacto y los acuerdos con las distintas fuentes de
información a fin de garantizar la actualización periódica de todos los
indicadores seleccionados; recoger, tratar informática y estadísticamente y
finalmente analizar la información recabada, a fin de poder ser integrado
tanto en el Sistema de Información Geográfica como en las distintas
publicaciones y elaborar diferentes informes a petición de terceros.
Finalmente, el
Observatorio cuenta con productos propios para la difusión y distribución
de datos e información estadística, tales como el informe del Observatorio del
Mercado Laboral; la encuesta de Demanda Turística; y publicaciones varias
(Guías: Estadística – del Inversor – de Servicios). Éstas están
dirigidas a un público muy diverso; desde empresarios, técnicos
estadísticos y de gobierno, agencias de marketing o desempleados hasta
instituciones no económicas y empresas. Los informes responden tanto a
peticiones específicas como a publicaciones periódicas.
Fuente: http://www.cordoba.gov.ar/Cordobaciudad/principal2/default.asp?ir=44